Los herederos de Polgovsky

Las críticas satanizan el trabajo infantil y califican la vida de esta gente de miserable.

La vida rural no es miserable ¿o hemos olvidado a Thoureau? y el trabajo dignifica, bien lo decían los nazis en la placa de la discordia: "Arbeit macht frei".

Lo grotesco es que son usados como mano de obra barata en la recogida de verduras, y el fruto de su trabajo seguramente va a parar al buche de algunos gordos que no viven en casa de adobe ni se van amontonados con otras personas en una camioneta de redilas a trabajar.

Con todo, yo no me regreso a vivir a Barcelona ni si tengo que tomar el agua esa sucia del charco y tengo que ir a recoger tomates para sobrevivir -aunque si encuentro una chamba mejor, pues por qué no, veá-.

Moraleja: Viva el trabajo artesanal y muera el trabajo asalariado.

Mañana me voy a bañar a jicarazos a la barranca del barrio y voy a sembrar mis milpitas en unos terrenos baldíos que hay aquí por la colonia.



Feliz navidad, querido lector.
Ojalá estés comiendo con gente cálida y alegre mientras la celebras.