Sobre el mestizaje
Parece que Dios mismo conduce los pasos del sajonismo, en tanto que nosotros nos matamos por el dogma o nos proclamamos ateos. ¡Cómo deben de reír de nuestros desplantes y vanidades latinas estos fuertes destructores de imperios! Ellos no tienen en la mente el lastre ciseroniano de la fraseología, ni en la sanger los instintos contradictorios de la mezcla de razas disímiles; pero cometieron el pecado de destruir esas razas, en tanto que nosotros las asimilamos, y esto nos da derechos nuevos y esperanzas de una misión sin precendentes en la Historia.
De La raza cósmica. José Vasconcelos