Nobody

Recuerdo que una vez le dije al Tona que no podía escuchar a Nina Simone porque aunque me gustara mucho siempre me ponía a llorar. Me dijo que él disfrutaba la música y lo relajaba y si yo lloraba era por mí, no por la música. Acabo de escuchar Nobody, de Nina Simone y a mí se me hace que el Tona no entiende la letra, porque, ¡joder, tíos! hay que ser muy insensible para no ponerse al menos un poco triste. Esa combinación pianito melancólico con esa voz profunda de mujer negra, sumado a la letra que dice que nadie nunca ha hecho nada por ella y que en el invierno ningún amigo le dice "ven, tómate una birra"... no puedo con eso.

Conclusión: El Tona disfruta con el dolor ajeno. ¡Es un sádico! Como el resto de mi funesta colección de exnovios, por eso, como decían los de Control Machete: más vale cholo, que mal acompañado.

Bueno, quede claro que más allá de la retórica, yo adoro a Tona.