Sobre mi sentimiento de castración
"... la teoría de la castración supone que la niña se percibe a sí misma como castrada, por carecer de pene, mientras que el niño, al observarla, teme perder el propio. La castración, vivenciada o temida, se convierte en un referente obligado de la cultura, tanto para hombres como para mujeres".
Esto gracias a Freud, en una nota explicativa sobre sus ideas fundacionales del campo del psicoanálisis en la introducción al libro de Julia Tuñón Mujeres de luz y sombra en el cine mexicano. La construcción de una imagen, 1939-1952. La afirmación es muy machista. No estoy de acuerdo, en absoluto. La única sensación que recuerdo de niña con respecto a los penes es que estaban mejor para orinar parado, me parecía injusto que los niños sí pudieran y yo no. Estuve practicando y alguna vez logré que me saliera todo hacia adelante, haciendo mucha presión. Y también tenía el placer prohibido de mirárselos a los chavitos, que te lo enseñaban por debajo de la banca en clase o atrás de los edificios de la escuela en los recreos.
Fuera de eso jamás he envidiado tener un pene. Son feos, chuecos y tienen una gama tonal que ni siquiera es la misma del resto del cuerpo. Dado el caso me gustaría tener uno con todo y un chico guapo pegado. Y con erecciones frecuentes y duraderas.
Me imagino que podría poner "juguete" en vez de pene en esta afirmación y sería más creíble. Mi vecinito sufría sin mis juguetes y yo claro, de ver que él tanto los quería, temía perderlos y no se los prestaba.
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